La inhumanidad de los seres humanos hacia los seres humanos subraya lo mucho que está en juego hoy en día.
     Cambio climático, Covid y Coerción (en Europa del Este) podrían ser consideradas las 4 ces' que afectan nuestros corazones y mentes actualmente.
     La verdad sobre “la Atmósfera, el Prana, la Mente”, parece innegable. La atmósfera perturbada y contaminada perturba el flujo y el equilibrio pránico y los terribles efectos resultantes en nuestras mentes y corazones, han puesto nuestro planeta verdaderamente en peligro.
    De hecho, la contaminación del pensamiento está levantando su fea cabeza y el único lugar para “esconderse” -la única salida- parece ser emplear y sacar provecho de la paz y el amor dentro de cada uno de nosotros, individual y colectivamente.
     Si el encontrar y el mantener esa paz interior fuera tan fácil, no necesitaríamos regresar a este concepto tan a menudo.
      ‘Simple, pero no fácil’, continúa siendo uno de los grandes mantras imperantes.
     A riesgo de ser repetitivo, el Quíntuple Sendero (QS) no es el 1 o 2 o 3, o incluso el cuádruple sendero.
     Las otras 4 herramientas además del núcleo, Agnihotra, son indispensables.
     Es posible que me regalen un automóvil nuevo. ¿Significa eso, sin embargo, que puedo ignorar los protocolos de cuidado, mantenimiento o incluso embellecimiento?

Se nos regaló el Agnihotra. Podríamos pensar en Daan, Tapa, Karma y Swadhyaya como el cuidado y mantenimiento.

El QS nos ayuda inmensurablemente con el intelecto, la emoción, el poder de discernimiento y la fuerza de voluntad. En resumen, nos ayuda a amarnos a nosotros mismos y a los demás.
    Tengan en cuenta, la palabra clave aquí puede que sea AYUDAS. Obtenemos ayuda para vivir y amar más plena, sincera e intensamente.
    No se nos están entregando las llaves del Reino de los Cielos (como las llaves del auto regalado). Pero se nos está apuntando en la dirección correcta, lo que no es un asunto menor considerando el nivel de noticias falsas, falsos profetas, falsas promesas y falsificaciones (mentiras) que nos bombardean diariamente.
    Debemos convertirnos en nuestros propios navegadores. Google Maps no es suficiente. Debemos filtrar las propuestas de la vida a través del colador de nuestras propias mentes, corazones y experiencias. Entonces y solo entonces es probable que tengamos más vislumbres del Reino de los Cielos que está a la vuelta de la esquina.
    Eso puede ser parte de “la única salida es ir dentro”.
     Ese es nuestro destino, nuestro objetivo, nuestra salvación.
    La frase ¿cómo puedo ayudar, cómo puedo servir? puede en realidad ser el obstáculo más importante.

A continuación extractos de las palabras de Parama Shree Gajanan Maharaj de Akalkot, India, como fueron grabados en su voz a principios de la década de 1980:

"Felicidad por siempre felicidad.
El sol brilla sobre la Nueva Era.
El Reino de los Cielos se acerca ahora, oh está cerca."

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"Alabados sean todos, oh viajeros del Reino de los Cielos. La Luz del Mundo ha descendido a la tierra.
La Luz Divina se está extendiendo hacia todo el planeta. El Reino de los Cielos está cerca.
Bienaventurados los que vieron la Luz, dichosos los que caminaron en la Luz, porque entrarán en el Reino de los Cielos, Om."

Voy a compartir con ustedes alguna información relacionada con Vyākaraṇa o Gramática Sánscrita y Śīkṣaṁ o Ciencia de la Pronunciación Védica desde una perspectiva lingüística/filológica descriptiva, inteligible y práctica, a propósito de un diálogo muy interesante y con algún grado de debate y controversia, desplegado por algunos amigos al interior del Grupo de WhatsApp Homa Chile hace algún tiempo, en relación con el poderoso Mantra rigvédico “Oṁ Tryambakaṁ” ejecutado con Yajña, con el objeto de purificar enérgicamente la atmósfera y la mente, particularmente en los amavāsyas (novilunios) y en los pūrṇimas (plenilunios).

Como ya sabemos, los Vedas que son el cuerpo de conocimientos científicos, filosóficos, espirituales, estéticos, éticos, didácticos y supertecnológicos de mayor antigüedad en la Historia de la Humanidad, han sido revelados en lengua sánscrita (saṁskṛta bhāṣā) desde épocas inmemoriales, en beneficio de todos los Seres conscientes y sentientes.

Todas y cada una de las colecciones de textos de esta revelación cuádruple (Chaturveda samāyuktaṁ = Ṛgveda, Yajurveda, Sāmaveda y Atharvaveda) en su versión escrita en alfabeto devanāgarī ̶ después de un período de transmisión de labios a oídos, de Guru a discípulo a lo largo de milenios ̶ se dividen en Mantras y Brāhmaṇas.

Los Mantras son conjuntos de palabras, sonidos y vibraciones en un riguroso orden métrico y matemático transmitidos a través de los Ṛṣis/Ṛṣayaḥ/Sabios y Sabias de tiempos védicos, para generar en todos los Seres y en todo el Universo infinidad de efectos sanadores, protectores, iluminadores y transmutacionales de extrema intensidad.

Los Brāhmaṇas son conjuntos de textos explicativos e interpretativos comunicados en prosa como complemento de los Mantras.

Sin duda, los Mantras son lo esencial de estas colecciones o saṁhitās y son los que

se cantan recitativamente con fuegos sanadores o yajñas en innumerables formas y variedades tales como Agnihotra, Vyāhruti, Tryambakaṁ, Rudrayāgas y Somayāgas.

Para garantizar la pureza absoluta de la vibración sonora transmitida a través de las edades, los Sabios védicos desarrollaron los Vedāṅgas o Ciencias auxiliares del Conocimiento Védico tales como Śīkṣaṁ, la Ciencia de la Pronunciación, Fonética y Prosodia; Chaṇḍas, Ciencia de la Métrica y Versificación Poética y Vyākaraṇa o Gramática entre otras ciencias complementarias.

Gracias a ciertas técnicas de recitación muy complejas y que demandan gran esfuerzo tapásico (de Tapas) o disciplinario (recitación ghana, krama, jaṭā, etc.), los Sabios Ṛṣis de la antigüedad preservaron a través de milenios la pronunciación y la entonación exactas y precisas, evitando toda distorsión o alteración fonética y vibratoria propias de las lenguas ordinarias o prákritas susceptibles de degradación o entropía fonética y semántica.

Sabemos que el Universo entero está en constante movimiento y oscilación. Todo está vibrando, la totalidad de los entes u objetos cósmicos fluctúa y vibra incesantemente con diversas frecuencias, amplitudes e intensidades. En donde hay vibración hay Sonido de las más diversas gamas.

Al pronunciar los Mantras védicos activamos estas vibraciones especiales creando ciertos efectos específicos. Estas vibraciones existen para todas las cosas y fenómenos. De este modo, todo puede ser activado, controlado armónicamente y transformado por medio de Mantras.

La Ciencia fonética védica descrita en el Yajurveda Saṁhitā, considera seis aspectos esenciales en la Pronunciación de Mantras, a saber: sonidos o fonemas (varṇa), acento (svara), cantidad o duración en función del tiempo (mātrā), fuerza o potencia (bala), articulación (sāma) y combinación/continuidad (santāna).

Este tratamiento exhaustivo del tema del sonido y del lenguaje prueba la relevancia extrema que tienen la pronunciación, ritmo y entonación de los Mantras para generar o producir los efectos vibratorios perfectos.

El célebre y potentísimo Mantra “Oṁ Tryambakaṁ” pertenece al Ṛg Veda Saṁhitā, la más arcaica colección de textos védicos. Está contenido en el maṇḍala 7, aṣṭaka 5, adhyāya 4, sūkta o himno 59, mantra 12. Fue revelado en época inmemorial al Sabio/Ṛṣi Vasiṣṭha Maitravaruṇi en la modalidad métrica anuṣṭubh y la Divinidad invocada es el Señor Rudra o Shiva Maheśvara. Este Mantra recibe el elocuente nombre de “mṛtyuvimocanī ṛk” o “mahāmṛtyuñjaya mantra”, es decir, mantra rigvédico aniquilador de la muerte y la destrucción.

Al cantar o recitar el Mantra en modalidad Saṁhitā Pāṭha, esto es de manera continua y repetida (con o sin fuego homa), todos los sonidos de la cadena fónica experimentan diversas transformaciones y especialmente en el área de combinación o coalescencia de ciertos fonemas particulares. Estas transformaciones que surgen como efectos fonéticos de las combinatorias de sonidos singulares de la cadena o secuencia mántrica constituyen lo que se denomina Saṅdhi o sea la sumatoria mutacional de sonidos sucesivos y yuxtapuestos en la serie fónica del Mantra.

Esto es lo que ocurre de modo notable en el comienzo del Mantra que estudiamos, al examinar con cierto detenimiento la relación entre la expresión Tryambakam que es uno de los epítetos divinos de Rudra/Shiva Maheśvar y la forma verbal Yajāmahe que significa nosotros/as ofrendamos. 

Desde el punto de vista gramatical el epíteto divino Tryambaka adquiere en su parte final una “m” (consonante nasal bilabial) debido a que está en caso acusativo o complemento directo, por ser objeto inmediato de la acción del verbo Yajāmahe, quedando de esta manera transformado en Tryambakam.

Según una norma o regla fonética de saṅdhi extrínseco, ese fonema sonoro nasal “m” en la parte final de la palabra, al ir seguido de la semivocal (antaḥstaḥ) “y” de Yajāmahe se convierte en otro sonido nasal más puro y radical, llamado “anusvāraḥ” que consiste en una vibracion de la cavidad rinofaríngea o nasofaríngea que masajea delicadamente la masa encefálica y el fluido cefalorraquídeo o cerebrospinal a través del paladar blando o velo del paladar.

Esta vibración resonante llamada “anusvāraḥ” se representa fonéticamente en la transcripción del sánscrito devanāgarī en caractéres latinos con una “ṁ” o con una “ṃ”. Yo particularmente prefiero la “m” con el punto escrito en la parte alta, es decir de la forma “ṁ”, porque en letras sánscritas se representa este sonido con un punto suprascrito o escrito sobre la letra “nasalizada”. A modo de ejemplo, la oclusiva sorda no-aspirada o consonante velar (skr.: kaṇṭhya) “k” se escribe en sánscrito devanāgarī con el carácter “क” que se transcribe en términos latinos o románicos “ka”. Cuando esta consonante se nasaliza fonéticamente de modo intenso y resonante, su vocal “a” implícita asume la vibración del anusvāra y entonces se transforma en “कं” que se translitera “kaṁ”.

El texto del Ṛg Veda Saṁhitā ya citado en que encontramos el Mantra Tryambakaṁ se translitera de este modo: “Oṁ Tryambakaṁ yajāmahe sugandhiṁ puṣṭivardhanam urvārukamiva bandhanānmṛtyormukṣīya māmṛtāt (Oṁ/Svāhā)”. Esta transcripción es la apropiada para el canto y recitación. Si observamos el primer segmento del Mantra, la expresión “Tryambakaṁ” ya exhibe en su parte final el anusvāra o sonido nasal resonante “ṁ”.

Como ya hemos señalado, cuando se lee o recita el Mantra de manera continua, se produce una transformación sonora al combinarse el segmento final de “Tryambakaṁ”, es decir “kaṁ” con el comienzo del verbo “Yaj” conjugado en la forma “Yajāmahe”, es decir, con la partícula “Ya”.                ¡Sigue en el próximo Boletín!...

Para aquellos que siguen el QUÍNTUPLE SENDERO, las respuestas se conocen a través de su propio esfuerzo por recorrer el camino con sinceridad y propósito. Cada paso es guiado. Cada paso es bendecido por la Gracia. Tan simple. Sin embargo, si uno lo sigue paso a paso, la realización comienza.

Uno no puede pensar en el camino de la propia realización.

Uno no puede leer sobre su camino hacia la paz interior y la armonía.

Uno no puede comprarlo.

Tampoco se puede vender.

Lo que se da, es dado por la Gracia como un plan para una vida vivida en paz.

El dinero es variable, como la corriente del mar. Dar sin esperar recompensa o reconocimiento abre las puertas a la Gracia. Es el segundo paso en el Quíntuple Sendero. Es reducir el dominio de las posesiones materiales y el apego a los bienes mundanos.

El tercer paso en el Quíntuple Sendero es TAPA, autodisciplina. Esto es entrenar a la mente descarriada para que aprenda a establecer parámetros claros a seguir en la vida. Uno puede afectar la disciplina en la mente mediante la práctica de la disciplina del cuerpo físico. Uno puede ganar control sobre sus papilas gustativas, llevando la mente a un estado de ser más disciplinado.

Tapa es un esfuerzo individual. Para cada persona hay una Tapa o conjunto de Tapas que será más efectivo para la vida de esa persona. Si uno comienza con la reducción de los apegos a ciertos alimentos, por ejemplo, los dulces, uno puede comenzar a ganar control sobre los pensamientos errantes, los miedos irracionales y los deseos indómitos en el mundo. TAPA es la forma de disciplinar el músculo de la MENTE y fortalecer la determinación de uno en el Quíntuple Sendero.

KARMA sigue como el cuarto paso en el Quíntuple Sendero. Cada acción tiene una reacción. Por lo tanto, siembren semillas de buen Karma todos los días. No importa cuál fue su pasado en esta vida, pueden crear un nuevo ciclo sembrando conscientemente semillas de amor, bondad en palabras y en acciones. Encuentren maneras de SERVIR en cada bendito día que les ha sido dado por Gracia. El karma abre las puertas a la ALEGRÍA.

Y por último, está SWADHYAYA, el quinto paso en el Quíntuple Sendero.

¿Quién soy yo? ¿Para qué estoy aquí?

Está más allá del concepto de carrera o familia o metas en el mundo material, aunque eso también puede ser beneficioso.

Mediante la práctica de Swadhyaya, uno se enfrenta valientemente a sí mismo: la Luz, las sombras, las alegrías, las tristezas, los anhelos, la gracia. Uno se enfrenta a sí mismo con un enfoque claro y honesto. Las respuestas a la pregunta: "¿Quién soy yo?" pueden no ser inmediatas ni siempre pueden tener sentido lógico para la mente.

A través de la meditación, uno comienza a abrir las puertas a la claridad, a la visión y a la llegada de la VERDAD.

Caminar el QUÍNTUPLE SENDERO es toda una vida de descubrimiento de las muchas capas del ser humano.

El Gozo que se puede descubrir es como ningún otro.

Caminen en la luz.

Este es el Camino de la Luz, como lo reveló Parama Sadguru Shree Gajanan Maharaj.

Todo el amor y las bendiciones estén con todos ustedes.

OM TAT SAT.